Israel —oficialmente Estado de Israel (en hebreo: מְדִינַת יִשְרָאֵל Medinat Yisra’el, AFI: [mediˈnat jisʁaˈʔel]; en árabe, دولة إِسرائيل (Dawlat Isrā’īl), AFI: [dawlat ʔisraːˈʔiːl])— es un país soberano de Oriente Próximo que se encuentra en la ribera sudoriental del mar Mediterráneo. Limita al norte con el Líbano, al este con Siria y Jordania, con Palestina y el mar muerto al este en Cisjordania, al oeste con la Franja de Gaza, al suroeste con Egipto y al sur con el golfo de Áqaba, en el mar Rojo. Con una población de casi 9 millones de habitantes, la mayoría de los cuales son judíos, Israel es el único Estado judío del mundo. Es también el hogar de árabes musulmanes, cristianos, drusos y samaritanos, así como otros grupos religiosos y étnicos minoritarios. La capital —con reconocimiento internacional limitado—, sede del gobierno y mayor ciudad del país es Jerusalén; el principal centro económico y financiero se encuentra en Tel Aviv-Yafo y el mayor centro industrial se localiza en Haifa.
El nuevo estado de Israel identifica sus raíces con la antigua Tierra de Israel (ארץ ישראל Eretz Yisrael), un concepto central para el judaísmo desde hace más de 3000 años. Después de la Primera Guerra Mundial y durante la partición del Imperio otomano, la Sociedad de Naciones aprobó el Mandato británico de Palestina con la intención de crear un «hogar nacional para el pueblo judío». En 1947, las Naciones Unidas aprobaron la partición de Palestina en dos Estados, uno judío y uno árabe. El 14 de mayo de 1948, el Estado de Israel declaró su independencia, lo cual fue seguido por la Guerra árabe-israelí de 1948 con los vecinos países árabes, que se negaron a aceptar el plan de la ONU. Las sucesivas victorias en una serie de guerras posteriores confirmaron su independencia y ampliaron las fronteras del Estado judío más allá de lo dispuesto en el Plan de Partición de las Naciones Unidas. Desde entonces, Israel ha estado en conflicto con muchos de los países árabes vecinos, con varias guerras y décadas de violencia. Desde su fundación, las fronteras de Israel e incluso el derecho a existir del propio Estado ha estado sujeto a controversias, especialmente entre sus vecinos árabes. Sin embargo, Israel ha firmado tratados de paz con Egipto y Jordania, y se han hecho esfuerzos para alcanzar un acuerdo permanente con la Autoridad Nacional Palestina.
En enero de 2020, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, presentó junto al primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, un plan de paz unilateral para resolver el conflicto.
Israel es una democracia representativa con un sistema parlamentario y sufragio universal. El primer ministro actúa como jefe de Gobierno y la Knéset como cuerpo legislativo de Israel. En términos de producto interior bruto, su economía está situada en el puesto 43.º según el Fondo Monetario Internacional. A su vez, Israel está altamente situado entre los países de Oriente Medio en desarrollo humano, libertad de expresión y competitividad económica.
Bandera de Israel:
Geografía de Israel:
En Israel se distinguen tres regiones geomorfológicas, de Oeste a Este: la llanura costera mediterránea, la cordillera central y el valle del río Jordán (la depresión más profunda de la Tierra). A estas tres regiones, hay que sumar la del desierto del Néguev, compuesto por una planicie y montañas calcáreas y situado al sur de Israel. Las regiones áridas ocupan más de la mitad del territorio de Israel.
Aun siendo desierto buena parte del territorio, en los valles abundan los lirios, y también los árboles como pinos, eucaliptos, olivos y acacias. Las retamas crecen esporádicamente en el desierto del Neguev. Existen iniciativas de reforestación que se llevan a cabo por todo el país, especialmente en las montañas, donde los pinos, robles, cipreses y laureles arraigan de forma exitosa.
Situado entre los desiertos de África y Asia, de una parte, y del mar Mediterráneo, cálido y húmedo, de la otra, Israel se encuentra en una encrucijada de influencias climáticas que han permitido distinguir hasta cuarenta tipos distintos de clima en tan reducida superficie. El régimen térmico varía notablemente con la altitud y la continentalidad, especialmente en invierno: de oeste a este se va pasando de un clima típico mediterráneo a uno continental. Las regiones montañosas suelen ser ventosas y muy frías -a veces con nevadas-. El pico del Monte Hermón está cubierto de nieve la mayor parte del año y Jerusalén generalmente recibe al menos una nevada cada año. Las ciudades costeras, como Tel Aviv y Haifa, tienen un típico clima mediterráneo con frío y lluvioso, con inviernos largos y veranos muy calurosos. En el extremo sur, en el golfo de Eilat, el clima es tropical seco.
La temperatura más alta del continente asiático (53,7 °C o 129 °F) se registró en 1942 en el kibutz Tirat Zvi, al norte del valle del Jordán.
En general se aprecia una estación seca (abril-octubre) y una lluviosa (desde octubre-noviembre hasta abril). De mayo a septiembre, son raras las lluvias en Israel. El mayor porcentaje de lluvias se alcanza entre mediados de enero y principios de marzo. La pluviosidad se incrementa de sur a norte y de este a oeste.
Capital: Jerusalén
Jerusalén (en hebreo, יְרוּשָׁלַיִם Yerushaláyim (?·i); en árabe, القـُدْس al-Quds (?·i)) es la capital de Israel y su ciudad más grande y poblada, con 865 700 residentes en un área de 125,1 kilómetros cuadrados. Los asentamientos más antiguos en Jerusalén son del V milenio a. C. y es una de las ciudades más antiguas del mundo. Jerusalén tiene un profundo significado religioso para el judaísmo, el cristianismo y el islam. Geográficamente, se sitúa en los montes de Judea, entre el mar Mediterráneo y la ribera norte del mar Muerto, y se ha extendido bastante más allá de los límites de la Ciudad Vieja.
El estatus de la parte oriental de la ciudad, conquistada en 1967 por Israel, se encuentra disputado, ya que en este sector —referido habitualmente como Jerusalén Este o Jerusalén Oriental, que incluye la Ciudad Vieja— es donde el Estado de Palestina pretende establecer su capital. Israel discute las reclamaciones palestinas y, tras la Guerra de los Seis Días, considera la ciudad como un todo unificado y un mismo municipio, declarándola como su capital «eterna e indivisible» mediante la Ley de Jerusalén en 1980. Esta anexión ha provocado un amplio rechazo en la comunidad internacional, materializado en la resolución 478 del Consejo de Seguridad de la ONU, que la consideró contraria al Derecho Internacional, y en señal de protesta por este acto unilateral los Estados miembros de las Naciones Unidas acabaron por trasladar sus embajadas a Tel Aviv, tal como pedía la resolución.
Jerusalén fue habitada por los jebuseos antes de la llegada de las tribus hebreas a Canaán a principios del siglo XIII a. C. Históricamente, y según la tradición, fue la antigua capital del Reino de Israel y del Reino de Judá, y siglos más tarde del reino franco de Jerusalén.
La Ciudad vieja de Jerusalén fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1981.